Hay muchas dudas sobre cómo aplicar la nueva medida del Gobierno en Castellón. Los asesores fiscales añaden que se les está dando «una importante carga administrativa».
Desde que se puso en marcha el pasado 12 de marzo la nueva norma obligatoria de tener que fichar en el trabajo, las dudas, las quejas y demás problemas se han sucedido a lo largo de la semana. Y todavía siguen. La obligatoriedad de fichar al entrar y al salir del trabajo está llena de críticas por parte de las pequeñas y medianas empresas de Castellón que se quejan de que no haya un método unificado y de la dificultad de aplicar el control en algunos colectivos de trabajadores. Además, los asesores añaden otro elemento más: una mayor carga de trabajo y coste a las pymes.
Luis Chinchilla, presidente de la Asociación Profesional de Asesores Fiscales, así lo deja claro: «El control diario de la jornada de trabajo no deja de ser una nueva carga administrativa importante, sobre todo cuando hablamos de pequeñas empresas, microempresas y autónomos». En el caso de los autónomos, estos solo lo llevarán a cabo si tienen trabajadores contratados.
Aun así, hay un punto positivo para las empresas, el mejorar su «rentabilidad y sus márgenes».
Tal es la confusión que existe en Castellón que la Asociación ha programado este viernes en la Fundación Caixa Castelló una jornada donde se abordará el tema con algunos expertos.
Mario Porcar, de la gestoría Porcar Fullena, comenta: «La gente está muy confusa. Hoy (por ayer) me preguntaba un empresario que cómo iba a aplicar el control horario sobre comerciales que ni siquiera pasan por la nave». En su opinión, ahora se puede firmar en un papel, pero «se va a imponer la geolocalización y la app, porque no hay otra manera de hacerlo que sea efectiva». Además, advierte de algo: «El empleado tiene que cumplir, ya que si no está atento al que van a sancionar no es a él, es a la empresa».
Por su parte, la gestoría Ramos Garijo de Castelló hace referencia a la moratoria de un mes que de facto -no oficial-aplicará el Ministerio de Trabajo respecto a la imposición de sanciones. «Tendría que ser más amplia para que se adapten las empresas, ya que más de uno no llegará a tiempo. Esto tiene que implicar un cambio de mentalidad. A la larga, creo que no va a haber ningún problema, se asimilará y será algo normal», expone a pesar de que ahora mismo son muchas las quejas que suscita.
Fuente: ElPeriódicoMediterráneo.